GutZ Publicado 16 de Febrero del 2012 Reportar Publicado 16 de Febrero del 2012 "Las palabras después, porque ahora no puedo. Lo voy a hacer, pero ahora estoy atragantado. Os quiero a todos. Me tenéis asustado. Me siento libre". Esas fueron las primeras palabras que pronunció Miguel Montes Neiro esta mañana, cuando salió de la cárcel y dejó de ser el preso más antiguo de España. Tras una serie de intentos de fuga frustados, Neiró permaneció 10.600 días tras las rejas y fue, según el diario el País, el hombre que más tiempo pasó en prisión en España. Conoce casi todas las cárceles de España y dice tener más amigos reclusos que libres. En 1976 lo detuvieron por primera vez y a partir de entonces y luego de reincidir en robos violentos cada vez que le otorgaban la libertad, fue enlazando condenas. Con excepción del tiempo de libertad condicional que consiguió varias veces (1600 días en total), su vida ha sido un periplo por centros penitenciarios. Fue "víctima de sus propios actos", reconoció su abogado, Félix Ángel Martín. "Se ha fugado en permisos y ha delinquido una vez tras otra, si bien es cierto que no cuenta con delitos de sangre en su historial", agregó el letrado. Apenas salió en libertad, Neiro dijo a la prensa española que su primer deseo era "caminar hasta dejar de ver la prisión y comer en un asador". Así, dejó atrás la cárcel de Albolote, entre aplausos y abrazos de familiares y amigos. El primer recuerdo se lo dedicó a sus jóvenes hijas, a las que según dijo, no puedo cuidar: "Cada vez que estaba fugado, ¿cómo me iba a llevar a mis niñas a un parque?". El veterano ahora ex convicto afirmó que "estas últimas horas, antes de salir de prisión, ha estado "como un león dando vueltas" y hasta confesó que se olvidó de la huelga de hambre que mantuvo para pedir su liberación. Neiro cree que, ya con 61 años, su vida de delitos ha terminado. Y así lo prometió ante su esposa de toda la vida y los periodistas que fueron a cubrir sus primeros minutos de libertad. "No voy a hacer nada. Lo vais a ver", dijo con énfasis. Montes Neiro, que es ceramista, quiere "hacer exposiciones" y vivir en Málaga. Está pendiente de un libro y una película sobre su vida, pero aseguró que no va a narrar nada que pueda causarle "daño" a otras personas. "Me voy a dedicar a mis niñas, que son mis diosas". "No soy una alimaña, no soy un bicho", dijo el flamante liberado justo antes de subir al auto que lo llevaría finalmente a su hogar Clarin
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