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Al asesino lo voy a estar esperando toda la vida...


NEO
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“Como padre, al asesino lo voy a esperar toda la vida, porque quiero que termine sus días en la cárcel”, dijo el ferretero, ex pareja de Bárbara Santos, otra de las víctimas del cuádruple crimen ocurrido entre la noche del 26 y los primeros minutos del 27 de noviembre.

 

Galle mantenía una relación fluida con Micaela.

 

Se veían casi todos los días.

 

 

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“Nunca sospechamos nada raro. El muchacho (por el karateca Osvaldo Martínez, novio de Bárbara y único sospechoso del caso) parecía bueno y trataba bien a la nena.

 

Incluso jugaba con ella”, reconoció el hombre, en entrevistas con la prensa platense.

 

No obstante, aclaró: “No sospecho de nadie más (que de él). Lo que dijo el remisero (testigo que dijo haber visto a Martínez en la escena del crimen) me cierra. Pero no quiero hablar de eso.

 

Confío en la Justicia ”.

 

Después de la detención de Martínez, la investigación por el cuádruple crimen ingresó en una etapa más lenta, a la espera de pericias y cotejos de ADN. Además de Micaela y Bárbara, esa noche mataron a Susana de Bárttole (madre y abuela de esas mujeres) y a Marisol Pereyra, una amiga.

 

Ayer, el fiscal Alvaro Garganta, tomo declaración a un testigo que dijo haber visto el auto de Martínez en la puerta del edificio donde ocurrieron los asesinatos. El que el auto del único imputado estuviese en el lugar del hecho es clave: él había declarado que a esa hora dormía en su casa.

 

También lo involucran testimonios que hablaban de una personalidad muy celosa y “posesiva” en su relación con Bárbara.

 

Para hoy también está prevista la rueda de reconocimiento en la que el remisero Marcelo Tagliaferro intentará identificar a Martínez como el hombre que salió del departamento el domingo a las 0,25, presumiblemente después de la matanza.

 

Desde la defensa también pidieron pericias. Pero Julio Belay, abogado de Martínez, reclamó incluir en esa rueda de identificación un reconocimiento de voz del acusado . El argumento: para Belay, la foto de su defendido fue difundida ampliamente, pero no su voz. Y el remisero Tagliaferro afirmó haber escuchado hablar al presunto asesino luego de que él llevara a una de las víctimas a la casa donde ocurrió la masacre.

 

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